Destacan ejemplo del beato Ceferino Namuncurá en el día de su celebración.
Ceferino fue un joven salesiano mapuche aspirante al sacerdocio.
El 26 de agosto de cada año se celebra la fiesta del Beato Ceferino Namuncurá, quién fuera un joven argentino aspirante al sacerdocio, de ascendencia mapuche y que falleció de tuberculosis a muy temprana edad, luego de dedicar su juventud a la vida eclesiástica.
Hoy, se destaca su ejemplo de fe y devoción al santísimo sacramento y a las raíces de su pueblo. Así lo contó el párroco de la Parroquia San José, Padre Raimundo Mena, a San José al Día.
En esta misma línea, el párroco aprovechó la oportunidad para pedir al beato Ceferino que interceda por la realidad social, para así evitar los conflictos y la discriminación, esto en el marco de las situaciones de violencia y discriminación contra el pueblo mapuche que se viven hasta el día de hoy. Así lo afirmó el padre Raimundo a San José al Día.
Fue en 1904 que Ceferino Namuncurá, acompañado por Monseñor Antonio Cagliero, partió a Italia, donde fue recibido por el Papa Pío X y luego continuó sus estudios religiosos en Turín. Su salud no soportó el rigor del invierno italiano y a fines de abril fue llevado a Roma, donde falleció de tuberculosis a la edad de 18 años.
